domingo, 18 de noviembre de 2012

Los que faltaron (Fco. Manuel Navas Gutiérrez)

El pasado miércoles, España sufrió su segunda huelga general en menos de un año. Su convocatoria agrupó a toda la ciudadanía, sin distinción de credos, color de piel, e incluso procedencia autonómica, a todo tipo de personas absolutamente indignadas con la situación económica que atraviesa el país, derivada directamente de una nefasta gestión de los bancos, siempre insaciables a la hora de ganar dinero a toda costa, y de la inoperancia, por no decir incapacidad intelectual y ética, de los gobiernos de turno.
           
Nadie puede sacar pecho en nombre de ninguna ideología política, afirmando, sin rubor, que su partido lo hace o lo hizo mejor. Desgraciadamente para los ciudadanos que trabajamos todos los días con apenas derecho a votar cada cuatro años, y pare usted de contar, estamos gobernados por una nueva clase social emergente y absolutamente rentable, como es la clase política, que se turna religiosamente en el poder, sin que importe el partido al que pertenece, sin cualificación laboral o profesional para los cargos que desempeña en la mayoría de los casos, asentada firmemente en una serie de privilegios que, incluso en el transcurso de esta terrible crisis que soportamos, no han sufrido merma alguna.
           
El miércoles pasado, durante el desarrollo de la concentración de mediodía en Chiclana, me entretuve, por unos instantes, mirando a mi alrededor. Y entonces me di perfectamente cuenta de quiénes estábamos allí y, sobre todo, de los que faltaban. Estábamos, entre hombres y mujeres, algunos jubilados, unos  cuantos representantes de los partidos políticos, algunos dirigentes sindicales, unos pocos funcionarios de diferentes servicios municipales y autonómicos, un reducido número de trabajadores autónomos, otro pequeño grupo de trabajadores por cuenta ajena, la policía nacional y la policía municipal, amén de algunos curiosos. No creo que sobrepasásemos los trescientos.
           

martes, 13 de noviembre de 2012

Huelga General (Marisa Rodríguez Cuevas)


El próximo miércoles, catorce de noviembre, habrá otra Huelga General, y como la voy a secundar, quiero expresar mi opinión sobre este tema. Convocan los sindicatos, que no sé a quienes representan, porque está más que demostrado que el margen de maniobra que tienen es bastante limitado. Podrían aprender de sus colegas europeos y copiar algo de ellos. En algunos países de Europa, es obligatorio estar sindicado en aquellas empresas que tengan más de 50 trabajadores.

En contrapartida, los días de huelga, sus sindicatos, le pagan el día de salario a sus afiliados. Así, aunque este pago no cubre la totalidad del día de trabajo, no pierden tanto dinero como nosotros. Eso sin olvidar que ese día  los señores sindicalistas cobran el día, y eso que ellos convocan  la huelga,  aunque en cuestión de salario con ellos no va la cosa. También se guardan de defender que las mejoras salariales o sociales obtenidas sean sólo para que aquellos que han secundado la huelga. De esta manera, la gente se acostumbraría a luchar por sus derechos.

Con estos sindicatos poco solucionaremos. Todos se sustentan con el dinero que les da el gobierno de turno.  En cualquier caso, voy a la huelga porque considero que tengo mucho más que perder que el día de salario que me descontarán, además de la parte proporcional de las pagas extraordinarias. No quiero ni una sanidad con menos servicios y prestaciones, ni una educación privada que favorezca a los ricos y a las órdenes religiosas. Apuesto por lo público porque creo que son muchos los servicios que se tienen prestar a la sociedad a través del estado, es obvio que la empresa privada sólo busca el máximo de beneficio al menor coste posible.

jueves, 20 de septiembre de 2012

Un Ayuntamiento blindado, ¿seguridad o temor? (EDITORIAL)

(Editorial) El equipo de Gobierno del PP ha puesto en funcionamiento esta semana una nueva medida de seguridad en la Casa Consistorial, a través de la cual los ciudadanos que quieran entrar deben hacerlo solo por la puerta delantera y pasando por un detector de metales.

Se trata de una medida que, según las fuentes municipales que siguen sin informarnos a este medio, tiene como finalidad aumentar la seguridad de los funcionarios y chiclaneros que entran en estas dependencias. Pero lo cierto es que más bien parece que vayamos a coger un avión o nos acerquemos a una embajada de Francia o Estados Unidos, ahora que las revueltas en los países árabes vuelven a aflorar.

Lejos quedan aquellos tiempos en los que el alcalde se paseaba por la calle La Vega y la gente lo paraba para elogiar las medidas puestas en marcha o para reprecharle cualquier otra cuestión. Todo ello dentro de la naturalidad que supone la cercanía del primer edil para con los ciudadanos.

¿Cambiará el Sr. Marín la chaquetita
por este nuevo uniforme?
Sin embargo, desde que accediera a la Alcaldía, allá por junio de 2011, Marín apenas se deja ver por las calles de su localidad y mucho menos solo. Tan solo hay que esperar que haya algún acontecimiento en el cercano Teatro Moderno para que el alcalde se traslade a pie por las calles del centro y la gran mayoría de las veces saliendo por la puerta de atrás, no sabemos si porque el camino es más corto o simplemente por temor a algún problema con los vecinos.

Todos estamos de acuerdo con el hecho de que la seguridad es positiva para una ciudad, pero blindar el edificio consistorial cuando su verdadera función es la de atender a todos los chiclaneros y visitantes, sin ningún tipo de discriminación, no creo que sea la mejor manera de lograr la confianza del pueblo. Un pueblo que sigue a la espera de que su alcalde le reciba en su despacho y escuche sus problemas.

A pesar del incremento de población en las últimas décadas, hasta superar los 80.000 habitantes, habría que recordarle al alcalde que Chiclana sigue siendo un pueblo (ahora más grande), en el que los vecinos siguen queriendo una mayor cercanía de su alcalde.

jueves, 14 de junio de 2012

Francia nos muestra el camino


Parece que una nueva forma de hacer política ha irrumpido en Europa. Ayer, un ministro del país vecino anunciaba que para todas aquellas personas que hubiesen cotizado cuarenta y un años, la edad de jubilación volvería a retrotraerse a los sesenta años. ¿ Gesto aislado? De ninguna manera. La medida tal vez afecte en Francia a sólo doscientas mil personas, pero supone la vuelta a la justicia social para quienes han estado trabajando prácticamente toda su vida. Y hablar de justicia social en los tiempos que corren, no es cuestión baladí.

La llegada al palacio del Elíseo del señor Holland ha conmocionado a Europa. Teniendo en cuenta su antecesor, poco tendría este presidente que esforzarse para hacer mejor las cosas. Sin embargo, desde un principio ha dejado claras sus intenciones y el talante de su gobierno: un gobierno que tiene su razón de ser en intentar proteger a los más débiles y desfavorecidos, en detrimento de los poderosos. Y los recursos de Francia deben destinarse, esencialmente, a lograr una mayor distribución de la riqueza, aplicando viejas recetas socialistas, sin estridencias.

Este hombre de aspecto afable, de no haber roto nunca un plato, se alzó como cabeza de lista por su partido tras una votación abierta a todo francés que quisiese participar. ¡Qué ejemplo de democracia para toda Europa, que continua cerrando y bloqueando sus listas para que la casta política, firmemente aferrada a su eterno lema    “ de aquí no nos mueve nadie”, se perpetúe en el poder. Y no se ha roto Francia, no, simplemente se ha destronado al nuevo pequeño Napoleón que se consideraba hasta hace pocas semanas, en compañía de la señora Merkel, el nuevo amo de Europa.


martes, 22 de mayo de 2012

Los puntos sobre las íes


Parece ser que el reciente acuerdo de gobierno entre el Partido Popular y el PVRE en Chiclana ha surtido los mismos efectos que apalear un avispero. Por definición, un pacto político es siempre susceptible de ser firmado entre fuerzas políticas con programas e idearios afines, aunque en Chiclana, como en tantas otras cosas, solemos sentar cátedra en cuanto a inventarnos nuevas definiciones absurdas que corrompen las definiciones en sí mismas. Recordemos, sin ir más lejos, el pacto cuatripartito de la pasada legislatura, donde cada partido, en la práctica diaria de gobierno, tiraba de un pico de la manta, hasta que se rompió. Después vino el pacto PSOE con el PSA, partido éste último que de socialista tiene lo que yo de torero.

Sin embargo, no nos olvidemos de que antes de que se gestara el pacto entre PP y PVRE, otro bien distinto, pero igualmente absurdo y anacrónico se estaba intentando llevar a cabo: el suscrito entre PSOE, IU y PVRE, partidos que se parecen entre sí como una alpargata a una lechuga, por lo que, caso de haberse formalizado, su final, como el rosario de la aurora, estaba de antemano cantado.

¿Son legítimos los pactos de gobierno? Evidentemente. Se supone que un pacto de gobierno se formaliza precisamente para eso, para poder gobernar, y gobernar presupone solucionar los problemas que aquejan a diario a la ciudad y a la ciudadanía.

sábado, 19 de mayo de 2012

Reducir el déficit 1-0 Programas de empleo

Si pudiéramos dividir la actual etapa corporativa en cuatro tiempos, como sucede en el baloncesto, lo que está claro es que en el primer cuarto (primer año) la clara vencedora es la reducción del déficit, que le ha ganado la partida a los planes de empleo.

Si Chiclana se encuentra en una situación muy grave, rozando los 14.000 parados, 2.000 más desde que Marín es alcalde, lo cierto es que, lejos de que el Gobierno del PP se ponga a trabajar para crear puestos de trabajo, se dedica casi exclusivamente a tratar de reducir el déficit y poco más.

Todos somos conscientes de que quitarse la deuda es muy importante en todas las familias, pero si dicha deuda es tan solo un tercio de lo anunciado una y otra vez, tampoco será para tanto. Y si, para colmo, hay miles de familias en Chiclana que no tienen ni para llegar a final de mes por culpa de la crisis y el desempleo, lo normal (que no lo que piensa este alcalde) es que se trabaje en programas de empleo a corto y medio plazo.

Marín ha anunciado ante los medios de comunicación (savlo Chiclana Plural, que sigue siendo ninguneada por su gabinete de Prensa) que se va a destinar 1,5 millones de euros en el PLES, aquel plan de empleo "desastroso" y que tanto quebraderos de cabeza están produciendo al señor Núñez, que gran parte de sus ruedas de prensa se centra en mirar al pasado, sobre todo, en este asunto.

martes, 15 de mayo de 2012

Corrupción generalizada


Ayer, escuchando la radio, creí que me daba un infarto. En unos minutos sólo, se sucedió tal cúmulo de noticias que dejarían petrificada a cualquier persona de bien. Familiares directos o indirectos de la clase política madrileña colocados en Bankia, indemnizaciones de 54 millones de euros a prejubilados que, a continuación, se hacen cargo de la dirección del banco, desconcierto generalizado entre los ministros del partido que gobierna y entre los que fueron ministros en el gobierno anterior ante un banco que cada día sigue perdiendo cientos de millones de euros, un muy bien pagado gobernador del Banco de España que no se entera de nada de lo que sucede en el oscuro mundo de la banca, consejeros de autonomías que cierran ambulatorios por la tarde, aunque mantienen sus consultas privadas abiertas, presidentes de comunidades autónomas expresándose en el más puro lenguaje machista ibérico, sindicalistas que coleccionan relojes de lujo, viajes a Marbella y cenas de alto standing a cargo del erario público, en fin, una sarta de despropósitos tal que justifican, más que de sobra, ese juicio simplista pero absolutamente cierto de que en España, al contrario de lo que se nos intenta hacer creer, la corrupción es algo tan generalizado y afecta de tal forma a los cimientos mismos del Estado que resulta prácticamente imposible que podamos erradicarla.